POR: MARIO ALEJANDRO RODRÍGUEZ (alhejo@periodistas.com)
Ha llegado el momento ideal para recuperar el honor y llevarse la otra mitad de la gloria en la Copa Colombia. Todo está preparado para que el vinotinto y oro, después de su fatal presentación la edición pasada, demuestre sus credenciales de buen fútbol y luche por el máximo premio: el tiquete a la Copa Sudamericana del 2010. El primer escollo en este largo y pedregoso camino al triunfo copero será el Deportivo Pereira, que mañana a partir de las ocho y media de la noche en el Hernán Ramírez Villegas de la “Perla del Otún” medirá fuerzas con los muchachos dirigidos por el estratega tolimense Hernán Torres Oliveros.
Los errores son para aprender y consecuencia de ello, la mentalidad tiene que ser positiva y el objetivo claro de cara a lo que será la segunda versión del torneo que reúne a los distintos equipos de la primera división y la categoría de ascenso. La responsabilidad con la hinchada tiene que ser máxima, sólo que el éxito se encargará de borrar huellas y también sinsabores del paladar futbolero pijao. No en vano fue el regular nivel presentado anteriormente por los denominados elencos grandes que literalmente “le sacaron el cuerpo” a la obligación de pelear la copa y prefirieron escudar su decisión en la disputa del Mustang, aduciendo que no había nomina suficiente para ser protagonista de lujo en ambos certámenes. A excepción de Equidad Seguros que le apostó al “premio mayor” y ganó con creces su inversión con el rótulo de campeón, dejando su nombre grabado en la historia de la División Mayor del Fútbol Colombiano. Las escuadras como Millonarios, Nacional, Santa Fe, América, Cali y el DIM dejaron mucho que desear de su prestigioso cartel y sumaron a su palmarés un fiasco rotundo la participación en esta competición.
En el caso del cuadro ibaguereño, los motivos para el fracaso en el debut fueron entre otros: una temprana eliminación en el Apertura, lo condujo tardíamente a poner todas sus esperanzas en la Colombia para salvar de algún modo la pésima campaña del semestre; pero la platilla que se tuvo (ampliamente superior a las de equipos de la Primera B como Expreso Rojo) no pudo mostrar a pleno sus condiciones como la afición y le periodismo deportivo local lo exigían, sumándole la gran influencia arbitral en los resultados del Tolima que decidió a la postre la suerte del “vino”: una eliminación anunciada .
Por ello, con una mezcla entre jugadores experimentados y créditos juveniles que piden sus oportunidad de figurar, además de nuevos rivales en su zona (Pereira y Palmira F.C,) se desea comenzar pisando fuerte, sumando puntos de inicio que sirvan de ahorro para futuras falencias que se puedan presentar. Nombres como Luis Arturo Peralta, Millar Piedrahita y Hamilton Acuña, jóvenes que se abren paso por los senderos del balompié colombiano serán los elementos llamados a ser el reemplazo, mejor el prometedor prospecto del club de Ibagué.
Entre tanto otros profesionales como Javier Valencia, Yesid Martínez, José Cáceres y Enrique Quiñones, al lado de Janer Serpa tienen por DEBER “reverdecer laureles”, y justificar con buen desempeño su presencia en la nómina del Deportes Tolima versión 2009. La vida muy pocas veces da segundas oportunidades en este deporte y por eso la vital importancia de dejar fluir su talento, es AHORA O NUNCA, y por el bien de la institución y por la normal celebración de este proyecto su nivel físicoatlético y táctico debe estar acorde a la circunstancias, al igual que el resto del grupo; incluidos también el Cuerpo Técnico en su totalidad.