Por: Mario Alejandro Rodríguez (alhejo@periodistas.com)
Ocho puntos en igual número de presentaciones, es decir un 33.3% de rendimiento es en resumidas cuentas el semestre que transcurre para el “vinotinto y oro”. La campaña del equipo no es la mejor, si se compara con la del semestre anterior cuando a esta altura tenía en su haber 13 unidades y se postulaba a ser líder del certamen.
El desempeño como local ha sido un total fiasco. De las cuatro jornadas disputadas en el Manuel Murillo Toro, dos han sido estrepitosas goleadas; con Quindío por marcador de 4-1 y la del fin de semana anterior con el Deportivo Cali de 3-0. Un empate con Cúcuta Deportivo (1-1), y una sola victoria, frente a Once Caldas (2-1) dejan ver el nivel que presenta el equipo en su predio.
Como visitante, aunque se logró una victoria vital ante Millonarios en la tercera fecha (2-0), y un empate en la ciudad de Medellín ante Nacional (1-1) en la quinta jornada, no ha alcanzando para recuperar el terreno perdido como local. Cuando se pensaba que el equipo venia en alza, el nivel bajó de nuevo y se sucumbió ante rivales con pocos argumentos como el mismo Deportivo Pasto y el mismo Cali, que sin tener mucho vencieron sin piedad a la escuadra tolimense.
En el esquema de juego del profesor Hernán Torres la defensa ha dejado mucho que desear, luego de que fuera el símbolo de seguridad y confianza. El cuarteto defensivo Díaz, Arrechea, Vallejo, Bustos y Monsalve y Virviescas como alternantes en el rendimiento colectivo han fallado, producto de ello que Tolima reciba tantas anotaciones en contra.
Por tal motivo la tribuna ya se está metiendo con el grupo de jugadores y cuerpo técnico. Porque en estos cuatro juegos han sido nueve goles en contra y sólo cuatro a favor, para un déficit de -5 en el “Coloso de la 37”. El temor de los hinchas es que el equipo vuelva al semestre “negro” del Apertura 2008, cuando terminó en la última posición con 15 puntos de 54 disputados.
Y lo más grave es que la misma se ha ido alejando del escenario deportivo. De las seis mil personas en promedio que asistían al Murillo, el promedio se ha bajado a casi 4 mil, con tendencia a caer a cerca de dos mil. Y esto acontece porque el juego del equipo no convence. A veces la falta de ideas, de creación y de definición hace que el panorama pinte oscuro para las posibilidades de clasificación.
Tal vez para algunos llegó la hora NUEVAMENTE de reflexionar sobre la viabilidad de la continuidad del estratega tolimense en el banquillo técnico. Los resultados de nuevo no acompañan, y puede que sea prematura cualquier decisión de cambio, pero la realidad en la tabla muestra a un equipo en el puesto 15 superando solamente a Boyacá Chicó y a Envigado F.C.
El trabajo de Torres no se niega, porque de antemano se sabe que es un hombre laborioso y dedicado en sus obligaciones para con el club. La pregunta por hacer entonces sería ¿Qué le pasa al Deportes Tolima? ….